Y son tus manos…
las que poco a poco se cierran alrededor de mi cuello y ejercen una presión tan ligera que es apenas perceptible…
son tus manos…
las que disfrazadas de inocente caricia, poco a poco me arrebatan el oxígeno cuando intento respirar…
y es que son tus manos…
las que siempre me han sostenido amorosamente, de las que más temo cuando la oscuridad me rodea al caer la primer gota de lluvia helada…
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Y estúpidamente, sigo creyendo que el sol brillará al llegar nuevamente la mañana…
como si no hubiera vivido ya demasiado tiempo en medio de toda esta oscuridad…
Escrito por NaryaButterfly
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